Para Sigrid Aguilar la fotografía es algo cautivador, sea desde el simple hecho de estar ante una cámara o manipularla para capturar imágenes desde una perspectiva muy personal. Sigrid trabaja el retrato artístico, el paisajismo y la fotografía documental; en todas las técnicas se asegura de captar escenas fascinantes y las acompaña de una perfecta postproducción.
Para la artista el interés por la fotografía surgió a los 17 años, cuando comenzaba un proceso de apreciación de la vida y sus manifestaciones. En esa etapa de su vida, recibió de su primo, una cámara “Point and Shoot” de Fujifilm con la que inicio a aventurarse en este arte. “Yo no sabía mayor cosa de la fotografía, solo aprendí a usar esa cámara y que me funcionara en lo que quería, ahí fui aprendiendo a encuadrar. De esta manera empezó todo: viendo y buscando compartir lo que veía.” comenta Sigrid sobre esta experiencia.
A continuación, las respuestas de Sigrid Aguilar, cuando se le preguntó sobre su carrera profesional y la conexión con la fotografía.
Por lo que recuerdo estudiaste Psicología, ¿En algún momento estudiaste algo relacionado con las artes visuales?
Anteriormente no estudié otra carrera vinculada con el arte visual, pero si me lo preguntan, en el arte hay mucho de psicología y en la psicología hay mucho de arte, de todo tipo. Acabo de cerrar la carrera y aún no he encontrado la forma de nombrar esta conexión: algunos compañeros(as) psicólogos(a) que conozco quisieron estudiar arquitectura por ejemplo, yo me incluyo. Nos gusta el arte visual, los performance, la actuación, la pintura, los esténciles, empapelados, la corporalidad. Definitivamente no hablo por todo el gremio, pero si por muchas personas que he conocido.
La conexión que percibo es la comprensión del sentir propio, que es muy humano. El inconsciente colectivo, que para algunos(as) es mito, para mi es realidad, es la afirmación de que así como existe algo que es muy propio de cada quien también hay algo que es muy propio de los grupos sociales y de la humanidad como especie. Si podemos heredar características físicas que le han permitido a la especie adaptarse y sobrevivir, así como características de comportamiento y reacción hacia circunstancias específicas, como lo son los instintos, me parece acorde que esta herencia responda a recuerdos de experiencias, a vivencias que van más allá de la individualidad. Desde la psicología he apreciado eso: la percepción humana; a pesar de que todos y todas somos diferentes, hay puntos en común: a algunos(as) les entristece cierta imagen, a otros(as) les fortalece, a unos(as) les da nostalgia, a otros(as) les alegra. Esto se ve permeado por las experiencias de vida propias y al encontrarnos con ESA imagen en específico generan en nosotros(as) tal o cual percepción. Pero las percepciones humanas no son inmutables y esa es la maravilla de expresarse, somos infinidad de posibilidades.
Tu trabajo visual es muy complejo ¿cuál ha sido tu formación? ¿Has recibido talleres o ha sido de forma autodidacta?